Han pasado los meses volando y me encuentro en la recta final del embarazo, y es ahora, justo en éste momento cuando a las noches de insomnio se suman mil pensamientos y sensaciones encontradas.
Os hablaba de los miedos en éste post que escribí al principio del embarazo, y en él os decía que seguro que cuando se fuese acercando el momento los miedos volverían, y no me equivoqué en absoluto, los miedos han vuelto y en mi cabeza purulan mil preguntas distintas.
Son miedos diferentes a los que tuve en un principio, si antes me preocupaba el proceso, ahora me preocupa el final, así como la reacción de mi cuerpo y, más importante, de mi mente.
He oído decir a muchas mujeres que el post parto es sin duda lo peor, las hormonas están a flor de piel, el cuerpo está dolorido, la inexperiencia, el miedo a lo desconocido…, y yo no puedo evitar transportarme a ése momento y pensar si estaré preparada, si lo haré bien, si estaré a la altura, etc.
Supongo que se trata de algo normal, el día D se acerca y los nervios nos traicionan.
Futuras mamis, contadme, ¿a vosotras os pasa lo mismo?.