Hacía demasiado tiempo que mis manos no lucían mínimamente decentes…
Fiel consumidora de lacas de uñas rojas, siempre he sido lo suficientemente apañada como para llevar la manicura perfecta.
Cuando dejé de tener el tiempo y la calma que se necesitan para tal menester, fue Adri quien se encargó de ello. Y ahora, cuarentenas y confinamientos mediante, me había olvidado de lo bien que sienta cuidarse…
El otro día le ví éste diseño a mi querida Olga y me dije ‘Laura, ya no tienes excusa’. Al día siguiente, con nocturnidad y alevosía, se la copié.
Es hiper fácil y el resultado no puede ser más original:
1. Se aplica una base
2. Para hacer el punto mojamos un palillo en la laca de uñas del color que queráis y lo ponéis sobre la uña hasta que se suelte una gota.
3. Dejamos secar bien y aplicamos un top coat
Os animo a todas a que dediquéis cada día un momento para cuidaros. Verse bien es sinónimo de estar bien con una misma y con los demás, ¿necesitas más motivos para hacerlo?.